Lecciones de democracia de baja intensidad (II)
Os prometo que lo último en que quiero convertir mi blog es en un archivo de artículos socio-políticos, pero es que día sí, día también, se le abren a unos las carnes con las noticias de actualidad.
Ayer, como muchos otros últimamente, fue un día funesto, sintomático de la paupérrima calidad de nuestro sistema ¿democrático?. Cuando el Presidente de Epaña Fútbol Club, Adenoid Hynkel, acompañado del Presidente de Naciones Vendidas, Coffee Anal, dio por concluida la sucinta rueda de prensa sobre la próxima Conferencia de Donantes (así llaman a los buitres que merodean alrededor de los cadáveres iraquíes) que se celebra en Madrí, pronunció estas solemnes palabras, dignas de figurar ahora y siempre en todos los manuales de ciencia política:
-"Dos preguntitas nada más, que nos tenemos que ir al partido de fútbol".
Ole. El Presidente de Naciones Vendidas llega a Madrí pero apenas puede atender a los medios de comunicación porque su anfitrión le lleva a ver un partido de fútbol.
¿Por qué se le permite al Presidente del Gobierno Epañol semejantes desprecios a la ciudadanía? Porque el pequeño gran hombre nos escupe a la cara cada día, y nosotros, agradecidos, relamemos su gapo con frucción y satisfacción.
Unas horas antes, 26 furgones de antidisturbios 26 se ocupaban de desalojar las instalaciones de Antena 3 para abortar un encierro pacífico de sus trabajadores, que protestaban por la ola de despidos indiscriminados que se avecina.
Primero fue Egunkaria, ahora Antena 3. Un simple telefonazo desde un despacho basta para que el tirano envíe a sus perros de presa a defender los privilegios de los poderosos, allí donde sea.
Esa es la realidad que vivimos, la realidad que tenemos, la realidad que PERMITIMOS cada día. Pero debemos estar contentos: este fin de semana echan fútbol por la tele, que es realmente lo que importa.
La Policía desaloja a trabajadores de Antena 3 concentrados en su sede en protesta contra los despidos
La policía desaloja a los empleados encerrados en Antena 3
Ayer, como muchos otros últimamente, fue un día funesto, sintomático de la paupérrima calidad de nuestro sistema ¿democrático?. Cuando el Presidente de Epaña Fútbol Club, Adenoid Hynkel, acompañado del Presidente de Naciones Vendidas, Coffee Anal, dio por concluida la sucinta rueda de prensa sobre la próxima Conferencia de Donantes (así llaman a los buitres que merodean alrededor de los cadáveres iraquíes) que se celebra en Madrí, pronunció estas solemnes palabras, dignas de figurar ahora y siempre en todos los manuales de ciencia política:
-"Dos preguntitas nada más, que nos tenemos que ir al partido de fútbol".
Ole. El Presidente de Naciones Vendidas llega a Madrí pero apenas puede atender a los medios de comunicación porque su anfitrión le lleva a ver un partido de fútbol.
¿Por qué se le permite al Presidente del Gobierno Epañol semejantes desprecios a la ciudadanía? Porque el pequeño gran hombre nos escupe a la cara cada día, y nosotros, agradecidos, relamemos su gapo con frucción y satisfacción.
Unas horas antes, 26 furgones de antidisturbios 26 se ocupaban de desalojar las instalaciones de Antena 3 para abortar un encierro pacífico de sus trabajadores, que protestaban por la ola de despidos indiscriminados que se avecina.
Primero fue Egunkaria, ahora Antena 3. Un simple telefonazo desde un despacho basta para que el tirano envíe a sus perros de presa a defender los privilegios de los poderosos, allí donde sea.
Esa es la realidad que vivimos, la realidad que tenemos, la realidad que PERMITIMOS cada día. Pero debemos estar contentos: este fin de semana echan fútbol por la tele, que es realmente lo que importa.
La Policía desaloja a trabajadores de Antena 3 concentrados en su sede en protesta contra los despidos
La policía desaloja a los empleados encerrados en Antena 3
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