Carta abierta al bebé que murió de frío
Te encontraron una fría mañana de febrero en una cajita de cartón, aterido y moribundo en tu primera y última hora de vida.
No tenías ropa pero sí el cordón umbilical que te unía a quien te dio la vida para después entregarte a una muerte segura. Quizá tu madre, tu casi madre, quería borrar pronto tu paso por este valle de lágrimas, abocándote a una existencia tan fugaz que no pudiera
recordarse, dejándote apenas reducido a una anomalía de unos meses. Es claro que ella no merece la vida que a ti se te ha negado pero, por si sirviera de algo, dejaremos que arrastre su indignidad para oprobio y vergüenza de nuestra raza, esa a la que tú ya no perteneces.
Conozco gente que hubiera dado todo lo que tiene por haberte encontrado a tiempo en esa cajita de cartón que fue tu cuna y tu ataúd. Gente que no te hubiera dejado morir de frío, que te hubiera amparado y protegido de las inclemencias de la existencia. Piensa en ellos cuando te avergüences de haber bajado aquí, a esta tierra ingrata y malograda. Quiero pedirte perdón en nombre del ser humano. Perdónanos a todos, si es que esto que te hemos hecho acaso pudiera perdonarse.
No tenías ropa pero sí el cordón umbilical que te unía a quien te dio la vida para después entregarte a una muerte segura. Quizá tu madre, tu casi madre, quería borrar pronto tu paso por este valle de lágrimas, abocándote a una existencia tan fugaz que no pudiera
recordarse, dejándote apenas reducido a una anomalía de unos meses. Es claro que ella no merece la vida que a ti se te ha negado pero, por si sirviera de algo, dejaremos que arrastre su indignidad para oprobio y vergüenza de nuestra raza, esa a la que tú ya no perteneces.
Conozco gente que hubiera dado todo lo que tiene por haberte encontrado a tiempo en esa cajita de cartón que fue tu cuna y tu ataúd. Gente que no te hubiera dejado morir de frío, que te hubiera amparado y protegido de las inclemencias de la existencia. Piensa en ellos cuando te avergüences de haber bajado aquí, a esta tierra ingrata y malograda. Quiero pedirte perdón en nombre del ser humano. Perdónanos a todos, si es que esto que te hemos hecho acaso pudiera perdonarse.
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home